Pues yo la verdad es que estoy agotada, mentalmente agotada. Tengo varios proyectos al mismo tiempo y estoy un poco saturada. Y tal y cómo me diría mi madre: "Quién mucho abarca poco aprieta". Por eso mismo he decidido bajar un poco la intensidad esta semana que entra, tomar distancia con las historias en las que estoy trabajando y volver luego con mucha más fuerza y centrada en el trabajo.
Así que sintiéndolo mucho el martes que viene no va a haber capítulo nuevo de Diseñando ilusiones. Necesito un respiro y zanjar algunos temas antes de proseguir con la historia.
Es verdaderamente frustrante tener un batiburrillo de ideas en la cabeza y no tener tiempo para plasmarlas por escrito, y lo peor de todo... tener que decidir qué escribir cada día. He decidido dar prioridad a lo más urgente y por desgracia he tenido que sacrificar el próximo capitulo semanal de Diseñando ilusiones.
Espero que lo entendáis y que dentro de dos martes volvamos tod@s con muchas más ganas y dispuest@s a seguir disfrutando con la historia de Nathaniel y Mar.
Un beso enorme y muchas muchas gracias por vuestra compresión.